lunes, julio 21, 2008

JOSE LUIS RODRIGUEZ "EL BUDA"











José Luís Rodríguez González es un legendario sabio, actor y cantante. Es una figura religiosa sagrada tanto para su padre como para los budistas e hindús.
Nació con el nombre de Siddhārta Rodriguez (en sánscrito सिद्धार्थ गौतम).

PRIMEROS AÑOS:

Según la tradición oral, poco después de su nacimiento fue visitado por el brahmán Asita, un colgao de gran reputación por su sabiduría y por sus dotes para interpretar rancheras. El sabio brahmán profetizó que Siddhārtha Rodríguez llegaría a ser un gran cantante o un gran maestro religioso, lo que consternó a su padre, que quería que su hijo siguiera sus mismos pasos y que un día le sucediera en el negocio familiar.

SUS INICIOS COMO CANTANTE:

El descubrimiento de la vejez, la enfermedad y la muerte fue traumático para Siddhārtha Rodríguez . Se dio cuenta de que también él estaba sujeto al mismo sufrimiento y su ánimo se tornó sombrío, pues se preguntaba cómo alguien podía vivir en paz y felicidad si esto era lo que le deparaba la vida. Así que decidió expresar ese sentimiento cantando baladas a mujeres orondas y casadas.
En una nueva salida al exterior, "El Buda" vio a un anacoreta, un empresario deportivo argentino ,Héctor Maselli, quien decide que vale la pena internacionalizarlo.

Se establece inicialmente en Calcuta (España) y firma contrato con Euro Aureola. Su LP más destacado en este período es "Atrévete Malandrín" (titulado en España, "Me Vas a Echar de Menos")

Al final de su periplo Siddhārtha Rodríguez caminó en un lugar llamado Bodhgaya, situado en Lepe, hasta sentarse bajo la sombra de un árbol llamado bo o bodhi (higuera, ficus religiosa), y hundiendo su cara en el fango dejó una huella imborrable hasta hoy, que ha pasado un niño con un triciclo y la ha borrado.




Cuando se despertó el caimán ya estaba en la cocina preparando un suculento desayuno.

-Hoy no voy a desayunar, gracias- dijo el Buda

Y se marchó.


-Dios te agarra para que no te caigas. Lo que pasa es que te clavó las uñas en los ojos porque fue lo primero que pilló. Pero no te preocupes, es fruto de su amor. Te araña porque no quiere que te caigas- dijo el caimán al topo

-Cállate gilipollas- espetó el topo algo disgustado.

1 comentario:

Ana Sánchez dijo...

El topo es sabio.
Es imposible comentar tu blog. O improbable. Lo sigo intentando, por si acaso: Tengo los ojos llenos de lágrimas. Y no es por las lentillas. Así que gracias, en nombre de Caín. Vivas sumamente mucho vivas.
Besos princesita.